La verdad es que la industria aérea y aeroespacial demuestra, una vez más, ser una de las más resilientes en el mundo y el Paris Air Show 2023 en Le Bourget, ha logrado ratificar no sólo que se recuperan, sino que la nueva tecnología está llegando a la aviación y en los próximos 20 años estaremos estrenando aeronaves de propulsión eléctrica y de hidrógeno tanto en aeronaves de mediano y largo alcance, como en movilidad urbana.
Lo interesante es que Le Bourget, ese pequeño aeropuerto donde Lindbergh logró coronar su hazaña del primer cruce del Atlántico y que parecía perdido para siempre, mientras Orly y Charles de Gaulle florecían, ha vuelto a recrearse para la aviación privada y vuelos cortos, además de su famoso museo y el Paris Air Show, que dejó de celebrarse en la pandemia pero que hoy vuelve por sus fueros “como en los viejos tiempos”, según dijo el CEO de Airbus.
En este marco, México ha logrado avances significativos en la atracción de inversiones y también en la adquisición de aeronaves y de motores, lo cual muestra que el sector aéreo y la industria aeroespacial son uno de los puntales económicos del país, aunque a veces pareciera que esto no se entiende y menos se le apoya.
Un dato interesante es que la industria aeroespacial en México volverá a crecer a los niveles de doble dígito y en 2023 lo hará al 18%, es decir, a un nivel no visto en años. La exposición que tuvieron los estados y las empresas nacionales en el Salón Aeronáutico de París 2023 logró que muchas empresas, como GE o como Safrán, refrendaran su confianza en México.
Además, ojo para los que no logran entender las ventajas de nuestra cercanía con Estados Unidos, el nearshoring se convierte hoy en un atractivo inigualable para este tipo de inversiones, ya que en esta ecuación no sólo juega la cercanía -que es importante- sino en particular los tratados comerciales con Europa y con Estados Unidos y Canadá, que permiten aprovechar las ventajas arancelarias, de inversión y de tecnologías, para incrementar los beneficios en ambos lados de la frontera con EU y reinventar la geopolítica que se aleja de Rusia y de China, para fortalecer a los bloques de Norteamérica y Europa.
Por otro lado, en el marco del Air Show de París se mostraron dos cosas importantes: una fue la cantidad de aeronaves comerciales colocadas (más de 1,525), además de los equipos militares exhibidos y adquiridos, muchos de los cuales no son públicos. La otra fue la exhibición, por vez primera, de los nuevos prototipos de aeronaves propulsadas por hidrógeno y por energía eléctrica, es decir, propulsores limpios que permitirán en el futuro no sólo apoyar la lucha contra el cambio climático y descarbonizar a la aviación, sino dejar de depender de los combustibles fósiles, que hoy representan el costo más alto para las aerolíneas y que causan enorme incertidumbre cuando hay fluctuaciones en el precio del crudo.
Sin duda que hay retos muy grandes en la industria aérea, como es la falta de personal capacitado y la presión por aumentar los salarios, pero también el binomio creciente bajo costo vs financiamiento de nuevas tecnologías en la industria. Interesante panorama. E-mail: [email protected]
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