Después de analizar la aplicación de una medida recíproca a la decisión de Estados Unidos, Canadá y Bruneí, de exigir la visa a ciertos países miembros de la Unión Europea (UE), la Comisión Europea (CE) dijo que esta situación sería contraproducente para la economía de la región.
La CE fue clara y aseguró que esto también podría impactar de manera negativa en las relaciones exteriores entre la UE y los dos países de América del Norte.
El organismo argumentó que analizó aplicar el principio de reciprocidad, debido que es parte de su obligación evaluar y aplicar medidas en un plazo de 24 meses si un país tercero no corrige la falta.
La Comisión aseveró que reintroducir visados para Estados Unidos, Canadá y Brunei generaría problemas a los Estados miembros de la UE a la hora de emitir un alto número de solicitudes de estos permisos en un plazo de 90 día, de acuerdo al Código Visa.
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