Pues finalmente se despejó la incógnita del Plan B para Mexicana que consiste en una renta de las llamadas “húmedas” (aviones con todo y tripulaciones), que por el momento será de una aeronave Embraer 145, matrícula XA-VGQ, para 50 pasajeros y que la aerolínea Olmeca-Maya-Mexica va a arrendarle a la aerolínea regional Transportes Aéreos Regionales (TAR), cuya sede está en Querétaro, empresa que ayer, escuetamente, confirmó que ya se está pintando con el emblema de Mexicana de Aviación.
Aunque era de esperarse que se buscara un plan B, no estaba tan claro cómo se daría este paso hacia la operación, porque el presidente había confirmado que hubo un acuerdo con la armadora Boeing, con sede en Seattle, Washington, para recibir asistencia en el proceso de arrendar 10 aeronaves Boeing 737. Esta aseveración fue confirmada por el presidente de Boeing para América Latina, Landom Loomis, durante el Foro de la Asociación Latinoamericana del Transporte Aéreo (ALTA) celebrado hace poco más de un mes en Cancún.
Y aunque en esa ocasión el director de la Agencia Federal de Aviación Civil (AFAC), General Miguel Vallín expresó que aún no se le había presentado a la agencia los aviones para registrarlos, el presidente reiteró en la mañanera que el proyecto seguía adelante como se había planeado.
Sin embargo, se sabe que el asunto del arrendamiento de los Boeing 737 se les atoró a los propietarios de la empresa Petrus, con sede en Texas, que incluso crearon una arrendadora, al SAT Aviation, para satisfacer los requisitos mínimos que supone una operación como esa, pero ante la falta de recursos parece que el tema está empantanado.
Acá en México, por mientras, se barajaron varias opciones. Una era comprarle a los dueños de Aeromar o a las financieras que en su momento ayudaron a esa aerolínea regional a arrendar los ATR72, que todavía están estacionados fuera de las ex oficinas de esa aerolínea en el AICM. Parece que ese asunto era muy complicado pues se deben rentas atrasadas y además la aerolínea sigue emplazada a huelga, por lo que los trabajadores tendrían que haber dado su anuencia para sacar las aeronaves de ahí.
Otra opción que se estuvo meditando era usar los B-737 de la Fuerza Aérea. Esta opción se estudió con seriedad, pero al final optaron por rentar a TAR un Embraer 145 de los varios que hoy posee para sus operaciones desde el aeropuerto de Querétaro.
Por el camino se sabe también que la segunda parte del pago a los trabajadores de Mexicana no llegará sino hasta enero, lo cual hace pensar que no hay mucho dinero para este proyecto, pese a que se le asignaron 4,000 millones de pesos desde Palacio Nacional. Pero al parecer hay otras prioridades por el camino.
En fin. Esperemos que con el Embraer 145 se puedan cubrir rutas más regionales y que la nueva Mexicana sirva para reconectar aquellas plazas menos favorecidas. Por lo pronto, el día 1 de diciembre el XA-GVQ saldrá de NLU (el AIFA) con destino Tulum, seguramente lleno de invitados especiales. A ver.
Lo oí en 123.45: Además, se debe investigar y hacer justicia en el caso de Mexicana de Aviación: anular las irregularidades, castigar a los responsables y resarcirle a los trabajadores su patrimonio. E-mail: [email protected]
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